1. Inspección de vehículos para identificar problemas mecánicos, eléctricos y electrónicos.
2. Diagnosticar problemas utilizando herramientas de diagnóstico, sistemas informáticos y métodos de comprobación manual.
3. Reparación o sustitución de piezas y componentes defectuosos, como motores, transmisiones, frenos y sistemas de suspensión.
4. Realización de tareas rutinarias de mantenimiento y revisión, incluidos cambios de aceite, rotaciones de neumáticos y sustituciones de filtros.
5. Realización de alineaciones de vehículos y equilibrado de ruedas.
6. Comprobación y ajuste de los sistemas del vehículo para garantizar su correcto funcionamiento y rendimiento.
7. Mantener registros precisos de las reparaciones, el mantenimiento y las piezas utilizadas.
8. Comunicarse con los clientes para explicarles las reparaciones, proporcionarles estimaciones de costes y resolver cualquier duda o pregunta que puedan tener.
9. Respetar las directrices y normas de seguridad al trabajar con materiales, herramientas y equipos peligrosos.
10. Mantenerse al día de las últimas tecnologías del automóvil y las tendencias del sector mediante la formación continua y el desarrollo profesional.